Así aumenta el riesgo de sufrir infarto o ictus durante las semanas posteriores a una gripe
22/09/2024
En la década de 1930, Selwyn D. Collins, estadístico del Servicio de Salud Pública de los Estados Unidos, descrito por primera vez la relación entre las epidemias de gripe y el aumento de muertes por accidentes cardiovasculares. Desde entonces, un número cada vez mayor de estudios identificaron esta infección viral muy común como un posible desencadenante de eventos cardiovasculares agudos, como infarto de miocardio y accidente cerebrovascular.
Las investigaciones realizadas hasta la fecha han concluido que el periodo con mayor probabilidad de sufrir un accidente cardiovascular serían las dos semanas siguientes a los casos más graves de gripe (la mayoría de los cuales fueron hospitalizados). un trabajo reciente lo que hicimos en Área de Investigación en Vacunas (AIV) de la Fundación Fisabio amplía a dos meses el período de mayor riesgo tras los casos más graves de infección.
Además, nuestro estudio destaca por primera vez el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular isquémico durante los 14 días posteriores a episodios de gripe más leves en personas con menos factores de riesgo.
Un estudio revelador
Pero ¿qué tiene de especial esta obra? En primer lugar, analizamos las bases de datos del sistema sanitario valencianoUno de los mejores sistemas digitales de información sanitaria que existen. Desde 2010 registran datos sociodemográficos y de salud de casi toda la población de la Comunidad Valenciana, que ronda los cinco millones de habitantes (el 10% de la población española y el 1% de la europea).
Utilizando datos de más de 2.300.000 personas mayores de 50 años, pudimos observar una fuerte correlación entre los casos de gripe y los eventos cardiovasculares agudos entre 2011 y 2018.
En segundo lugar, el diseño de la investigación (llamado serie de casos autocontrolados) reduce la confusión típica de los estudios observacionales causada por las diferencias individuales entre individuos infectados y no infectados.
Específicamente, comparamos diferentes períodos de tiempo para el mismo individuo: aquellos en riesgo (justo después de la gripe) y el valor inicial (que cubre el resto del tiempo de seguimiento disponible para la misma persona). Por lo tanto, seleccionamos individuos que sufrieron gripe y accidentes cardiovasculares y comparamos el número de eventos cardiovasculares en los períodos de riesgo con el número registrado en los períodos iniciales.
Finalmente, a diferencia de otras investigaciones, analizamos casos de gripe con diferentes niveles de gravedad. La asociación encontrada en estudios anteriores sólo puede atribuirse a los casos más graves de infección. Correspondieron principalmente a pacientes hospitalizados, a quienes normalmente se les realizan pruebas de confirmación en el laboratorio. Sin embargo, nuestro trabajo también evalúa la posible relación con episodios menos graves, tratados en centros de atención primaria y sin pruebas de laboratorio asociadas, en base a diagnósticos clínicos.
Las dos primeras semanas, las más críticas
El estudio muestra grandes diferencias iniciales entre personas con síntomas de gripe de diferente gravedad. Así, los individuos hospitalizados con enfermedad confirmada por laboratorio tenían mayor edad, mayor mortalidad y cuatro o más patologías crónicas en mayor proporción que los casos diagnosticados en atención primaria.
Según los datos obtenidos, la probabilidad de sufrir un infarto agudo de miocardio o un ictus isquémico es más de cuatro veces mayor durante los 14 días siguientes a un caso grave de gripe en pacientes con problemas de salud. Además, este riesgo sigue siendo más del doble durante los dos meses posteriores a la infección.
Y cuando se trata de casos de gripe más leves en personas con menos factores de riesgo, las posibilidades de sufrir un ataque cardíaco y un accidente cerebrovascular isquémico se duplican durante los 14 días posteriores a la infección.
Los mecanismos exactos responsables de esta relación siguen siendo desconocidos. Una de las hipótesis punto Puede estar implicada la desestabilización de las placas ateroscleróticas (acumulación de grasa, colesterol, calcio y otras sustancias que se forman en las paredes de las arterias) provocada por citocinas inflamatorias. Estas son proteínas que el sistema inmunológico produce como señales para coordinar la respuesta del cuerpo a una lesión, enfermedad o infección como la causada por el virus de la gripe.
Nuestros resultados no sólo refuerzan las recomendaciones oficiales para prevenir la gripe mediante la vacunación en grupos de riesgo, sino que también deberían concienciar sobre las posibles complicaciones de los casos más leves en la población general.
Cintia Muñoz QuilesDoctora en Biología, Investigadora del Área de Investigación en Vacunas, Fisabio